El presidente Luis Lacalle Pou informó en rueda de prensa que el gobierno decretó la emergencia hídrica para Montevideo y la zona metropolitana. No obstante, el jefe de Estado sostuvo que «el suministro de agua está garantizado» y «no se va a cortar».
Asimismo, el mandatario confirmó que mañana comienza la obra del embalse en el río San José (atraviesa los departamentos de Flores y San José), por una cifra cercana a los 20 millones de dólares y con materiales provenientes de la Argentina y Brasil, buscando tener una nueva fuente de agua para la capital.
De acuerdo con Lacalle Pou, el plazo máximo previsto para culminar esta obra es de 30 días y luego se anunciará si, a raíz de incorporar esta fuente, la calidad del agua suministrada “se deteriora o hay algún cambio”.
Además, explicó que todas las nuevas medidas que tomó el gobierno están basadas en un escenario de inexistencias de lluvia dentro de las próximas semanas, y defendió la gestión de su gobierno al recordar que desde hacía meses se venía gestando la licitación del Proyecto Arazatí, una obra que según entiende, «pondrá fin a los problemas venideros».
El gobierno exonerará de impuestos al agua embotellada
Por otro lado, Lacalle Pou anunció que tras la declaración de emergencia hídrica, que habilita al gobierno a tener procesos jurídicos «más rápidos y más sencillos», se estará exonerando de impuestos al agua embotellada a partir de un proyecto de ley que será enviado al Parlamento.
Supone que a partir de esta determinación gubernamental el precio del agua embotellada debería tender a la baja de manera «sensible». En esa misma línea, anunció que se extendió el suministro gratuito de dos litros de agua por día para beneficiarios del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), el cual en primera instancia estaba previsto hasta julio.
Esta medida se sumará a la de garantizar un suministro especial -sin el nivel aumentado de sodio y cloro presente en el actual que brinda OSE en Montevideo y alrededores- para los hospitales y otros centros de cuidado de adultos mayores, niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad.
Por último, el presidente manifestó que el problema de los faltantes de agua embotellada en las pequeñas superficies comerciales se debe más a un problema de envases que de suministro de agua, ya que «se duplicó el consumo», y «en algunos picos se multiplicó por 5».
